Hoy 25 de octubre se cumplen 300 años de la muerte de José de Mora Ginarte y López Criado; el gran José de Mora.

El 25 de octubre de 1724, con ochenta y dos años, fallecía y era enterrado junto a los restos de su esposa Luisa de Mena y Herrera en el convento de San Antonio y San Diego del Albaicín; que existió hasta la desamortización decimonónica junto a la muralla de la Alberzana, cercano a la Iglesia de San Cristóbal, del que todavía se pueden observar sus restos.

De él nos dice su contemporáneo el pintor cordobés Antonio Palomino que “verdaderamente fue hombre amable, y muy caballeroso, honrador de los artífices, pacífico, honesto, casto, y en todo linaje de virtud muy aprovechado; y me aseguraron que cuando mozo había sido lo mismo”.

De su fama nos dice el mismo biógrafo que “sus obras fueron muy bien pagadas y estimadas: porque además de su perfección, su gran porte y modo las sublimaban mucho”. José de Mora es el eslabón central de la escuela barroca de imaginería granadina; él recoge las enseñanzas de su padre Bernardo, de Alonso Cano y de Pedro de Mena, de quien era pariente por parte materna.

José sumó a esto su talento natural desde muy joven, llegando a ser escultor de cámara del rey Carlos II entre 1673 y 1679. Su huella es profunda en la estética y en la plástica de la imaginería granadina posterior; sus modelos se perpetúan a través del taller familiar y de los numerosos colaboradores que en este se formaron, el tan mencionado “círculo de Mora”.

De él se conservan numerosas obras, tanto devocionales como procesionales, entre ellas el Ecce Homo que tallara a cambio de una memoria de misas por su alma para el Convento de Ntra. Sra. de la Cabeza de Carmelitas Calzados de Granada en 1685.

Soberbia imagen de talla completa de uno de sus temas más desarrollados que, tras numerosos avatares, un siglo después de llegar a la Parroquia de San Pedro y San Pablo procedente del Museo de Bellas Artes se convertiría en el titular de nuestra Cofradía; Jesús de la Sentencia.

Hoy miramos la delicada y portentosa talla del Señor de la Sentencia, el Ecce Homo de Mora, el milagroso Señor de la Humildad al que recurrían los granadinos en tiempos de sequías, y recordamos y oramos por el alma inmortal del genio que nos legó tan soberbio simulacro. Un alma tan inmortal como la obra de sus manos.

Para saber más, compartimos las biografías que de José de Mora han hecho los profesores del Historia del Arte; Dr. D. Juan Jesús López-Guadalupe Muñoz para la Real Academia de la Historia: José de Mora Ginarte y López Criado | Real Academia de la Historia

Y el Dr. D. José Antonio Díaz Gómez para la Universidad de Almería: José de Mora, escultor (1642–1724) – Identidad e Imagen de Andalucía en la Edad Moderna